Alejandro Ginevra es presidente de GNV Group, con una extensa trayectoria en el Real Estate local que comenzó con la empresa familiar y ese estilo continúa a través de las generaciones. Hace más de dos décadas está abocado al desarrollo de proyectos en Puerto Madero, particularmente en el dique 1. Ahora avanza con Harbour Tower, que según su definición será la mejor torre de Buenos Aires, con el diseño del famoso arquitecto Carlos Ott.
Y si, para Alejandro Ginevra el dique 1, lleva en gran medida la impronta de su desarrollo con el gran emprendimiento Madero Harbour, como también la torre El Malecón, en el vértice sur de Puerto Madero. “Comencé a los 17 años y me sume a la empresa familiar. Llevo casi 40 años de experiencia, lo que me permitió conocer a todos los actores del mercado. Hemos crecido más allá de los cambios, de las crisis. Y como todos soportamos altibajos y dificultades”.
¿Por qué el dique 1?
En realidad esas tierras las adquirió mi padre en el año 1992. Eran 20 ha y después se sumó una más, donde se construyó el edificio El Malecón. Después nos tocó urbanizar las 20 ha, construir las calles, realizar las subdivisiones. Yo vendí algunas parcelas. Nos concentramos en 8 ha para desarrollar Madero Harbour y uno de los edificios que lo integrará es precisamente Harbour Tower, que se está construyendo. Será una torre emblemática, de 192 metros, que diseña el arquitecto Carlos Ott.
¿Queda tierra aún para construir en el barrio más joven de la ciudad?
Tierra no queda, sí metros cuadrados, como en nuestro caso y el de otros desarrolladores para construir. A mi queda edificar además un hotel y un shopping center, de características diferentes, que se llamará Shops at Madero Harbour. Será un centro comercial distinto, de lo que existe hoy en el mercado.
Estás muy identificado con Puerto Madero…
Es así. Hace años que empezamos en este megaproyecto. Trabajamos y vivimos en esta zona porteña y conocemos todo lo que sucede allí. También colaboramos con los vecinos para que el barrio mejore, incluso tenemos participación activa con los vecinos de Rodrigo Bueno, que están incorporados a la comuna. Nosotros construimos, pero nos quedamos allí, trabajando. En el caso del hotel, lo vamos a gerenciar con una licencia. El centro comercial y las oficinas las vamos a administrar nosotros.
¿Pensás construir en otras zonas?
Sí, estamos mirando el interior. Por ejemplo, buscamos tierra en Rosario o Córdoba, para aplicar el mismo modelo que en Puerto Madero de edificios con usos mixtos. Lo construimos para luego operarlo.
En el caso del hotel que se construirá en el dique 1, ¿ofrecerá sus servicios a Harbour Tower?
Sí, el hotel acompaña la torre residencial, con todos los servicios. Es un concepto moderno que se aplica en el mundo. Los desarrollos evolucionan y los amenities que ofrece los hoteles están siempre vigentes y actualizados. Al hotel también le sirve porque suma movimiento y es una buena combinación.
¿Cuáles son las características de Harbour Tower?
Se buscó construir un edificio diferente. Su diseño es único, donde todos los departamentos tienen diferentes superficies. No se repite el modelo de un piso a otro. Parten de los 80 m2 hasta el penthouse con 1200 m2, en los pisos 51 y 52. Será la mejor torre de Buenos Aires.
¿Cómo es trabajar con Carlos Ott?
Es muy interesante. Valoro su prestigio y a la vez su simpleza. Es una buena persona y un arquitecto de prestigio internacional. Comenzamos hace unos meses la estructura de la torre, 40 metros hacia abajo para instalar los pilotes. Llevará 36 meses terminarla. Es una gran experiencia trabajar en este tipo de obra, construyendo sobre el agua, un tema difícil que exige sumo cuidado y sofisticación.
¿Cuál es tu mirada del mercado actual?
Estoy contento. Vamos a vivir una importante expansión en los próximos años. Aunque no creo que sea tan rápido como se piensa. El mundo no olvida todo lo que pasó en la Argentina. Hay que recuperar la confianza. Los fondos nos están mirando, pero quieren asegurarse de la evolución del país. Ha sido muy importante la elección. Siempre soñé con estas etapas. Creo que ahora habrá una continuidad. No puede ser que sea moda construir. Tiene que ser una constante como cualquier otro rubro. Va surgir un enorme desarrollo social como no hubo nunca en la Argentina y esto será importantísimo. El tema de la vivienda es central y esto será vital para el país, construyendo para todos los segmentos.