Javier Igarzabal, director de DIC Propiedades, mantiene pese a los momentos que genera la coyuntura, una mirada optimista del sector, particularmente el residencial, donde la demanda en ese amplio tramo urbano siempre está en la búsqueda de propiedades. Con precios que se acomodaron después de la devaluación, siguen las propuestas para diferentes segmentos en un tiempo de nuevos desafíos.
DIC es una empresa tradicional…
Sí hace más de 35 años que está en el mercado, dedicada al rubro inmobiliario, en particular en el sector residencial, para venta o alquiler, usado o nuevo. Contamos con cinco sucursales en la zona norte y una oficina en Palermo. Participamos de la comercialización de los desarrollos, buscamos los terrenos y contamos con un equipo de productores que hace muchos años que buscan lotes bien ubicados para los constructores. La zona norte sigue fuerte sobre la avenida Maipú, más aún con el Metrobus, que llega hasta la calle Paraná y por otro lado se conecta con la Capital. Esto facilitó que muchos desarrolladores encontraran tanto en las avenidas Maipú como Libertador la posibilidad de encarar emprendimientos importantes, considerando además que en la Capital la oferta de tierra se extingue y encarece. De modo que la zona norte resulta una alternativa muy interesante en el área residencial; también en oficinas, en sectores como Panamericana y Dardo Rocha.
¿Qué sucede con las variables?
Las desarrolladoras mantienen los equipos de trabajo en los rubros de la construcción y pese a los momentos difíciles tratan de acomodarse para seguir produciendo propiedades. Es obvio que se sintió el impacto de la subida del dólar y de hecho las constructoras, y sobre todo nuestros clientes, acordaron modificar los valores de las unidades nuevas un 15% menos con respecto a principios de 2018. La intención es captar por parte de importantes marcas la demanda de inversores que consideran que es un buen momento para comprar. En general esa demanda se interesa por departamentos de 1, 2 y 3 ambientes, desde más de 20 m2 hasta 55 m2, en los que generalmente se puede entrar y salir más rápido. Se accede pagando un pequeño adelanto y durante la obra, en cuotas. Muchas veces revenden la propiedad a pocos meses de haber entrado en el desarrollo. Teniendo rentabilidad en dólares es interesante y seguro, pero si decide quedarse con la unidad resulta al final del camino un resguardo de valor.
¿Donde se consigue buena tierra?
Estamos construyendo mucho sobre la avenida Maipú. Se observa crecimiento en el partido de Vicente López, que abarca Vicente López, Florida, Olivos y la Lucila. Allí se construyen edificios de apenas siete pisos entre medianeras y también torres. Tanto nosotros como la competencia, ofrecemos propuestas para diferentes segmentos. Algunas con pocos gastos fijos y expensas bajas; otras ofrecen a inversores que buscan edificios con amenities y servicios de alta gama. Entre los que adquieren esas unidades también figuran propietarios que dejan sus casas y eligen unidades de tres o cuatro ambientes. Venden sus propiedades porque los impuestos son muy costosos y en general son más difíciles de mantener. En las unidades nuevas que eligen tienen seguridad y más comodidades que la casa que habitaban. La gente se acomoda a los tiempos actuales, con diversidad de oferta para clientes que pueden pagar esos gastos fijos altos; también hay oferta para otro segmento menos exigente. Respecto de los terrenos se consiguen con variedad de superficie: en algunos casos surgen de locales comerciales o de PH que ya no están en condiciones. A la hora de construir la oferta es variada y genera muchas alternativas. Muy cerca de Capital, la zona norte muestra un crecimiento muy importante.
Pensando en los jóvenes…
Para ese target se plantean edificios con espacios mixtos, entre viviendas, oficinas y locales comerciales. La demanda cambia y las nuevas generaciones quieren estar cómodos, contar con más tiempo libre y evitar viajar mucho. Las constructoras tratan de adaptarse para ofrecer lo que los más jóvenes buscan: trabajar y vivir cerca, en muchos casos en el mismo lugar, con toda la tecnología. Se suman también espacios de coworking, donde se juntan distintos profesionales que ofrecen sus servicios y bajan los costos. En Palermo justamente trabajamos en una oficina -en la Comunidad de Negocios Inmobiliarios- adaptándonos a los cambios con calidad de servicios. Interactuamos con cientos de inmobiliarias que están en estos espacios y agilizamos la búsqueda de propiedades para los clientes que piden ventas o alquileres con muy buena respuesta. Los colegas fuimos aprendiendo y adaptándonos a este sistema tanto los titulares de las oficinas como nuestros colaboradores que están muy adaptados y concientizados en que la venta hoy viene por ese carril. Al cliente hay que ofrecerle las propiedades inmediatamente. La plataforma de Argenprop permite que la gente cuente con la opción que necesita con la variedad que ofrecen cientos de inmobiliarias. Todos nos preocupamos y competimos para que las propiedades que nos ofrecen en venta o alquiler figuren en los primeros resultados de búsqueda, con buenas fotos e información. El cliente valora muchísimo que su propiedad se destaque y que sus fotos sean de primera calidad.
Más exigencias de la demanda
El cliente sigue minuto a minuto la comercialización de su propiedad. Enseguida que ingresa el inmueble a la venta a una inmobiliaria, nuestros sistemas de gestión llevan la información al titular de la propiedad. De manera que al minuto que se ingresa a la propiedad miles de clientes se enteran de que ese inmueble está a la venta o en alquiler. Y el propietario en ese mismo momento se entera de la cantidad de gente que vio su aviso. El estilo de venta cambió y es importante ofrecer el mejor servicio.
El año concluye…
Sí. Vivimos un 2017 muy bueno a nivel ventas y justamente aplicamos muchas herramientas gracias a los resultados de ese año y el primer cuatrimestre de 2018, con la llegada de los créditos hipotecarios que impulsó al sector. Cuando el dólar está estable, los créditos crecen y la demanda se sostiene. Logramos muy buenos resultados, pero después la situación cambió con la devaluación de la moneda y hubo que entrenarse para encarar otra etapa. Ahora nuevamente con el dólar más estable con estas bandas que aplicó el gobierno y más estabilidad, la demanda de a poco se interesa por las propiedades. Somos optimistas y esperamos que el gobierno mantenga en la misma dirección la economía para generar credibilidad y ayudar a empujar este mercado y a esta industria tan potente, que generan empleo. Ponemos lo mejor de parte del equipo y el de Argenprop; la idea es que juntos logremos nuestros objetivos. Creemos que la situación mejorará lentamente para el año próximo.