El Feng Shui es un arte ancestral de más de 4.000 años que se basa en la cosmogonía china y busca mejorar las condiciones ambientales para fomentar el bienestar y la armonía general del individuo con su entorno. Ordenando colores, objetos y ubicándolos en lugares especiales, podemos generar un espacio energéticamente ordenado.
¿Cómo combinar los conceptos milenarios del Feng Shui con la occidental Navidad? Es simple. Es cierto que el Feng Shui y la Navidad suponen dos tradiciones diferentes, pero al estudiarlas en profundidad podemos encontrar que comparten muchos elementos en común: la madera alimenta al fuego, que la necesita para arder. El fuego, con sus cenizas, produce la tierra, que alberga los minerales que alimentan el agua, que da vida a la madera (riega los árboles). Esto circula perpetuamente.
¿Cómo podríamos llevar estos elementos a nuestra decoración navideña?
– Al decorar un ambiente para Navidad no puede faltar el clásico árbol navideño. El árbol, sea real o decorativo, evoca de por sí el crecimiento y el elemento de la madera. Según la especialista Patricia Traversa, “las mejores orientaciones para armar el arbolito son: Norte, Noreste y Este del Living”.
– Una vez colocado el árbol debemos agregarle las clásicas decoraciones navideñas. El rojo y el verde juntos son una combinación auspiciosa a la hora de estimular la unión familiar. El color verde (la tierra), el rojo (el fuego, el movimiento) y el dorado, que representa el oro y el metal, y la abundancia tienen que estar presentes.
– La entrada de la casa para los chinos es un lugar muy importante, pues a través de ella entran las energías positivas y negativas, por eso se utilizan amuletos. Son frecuentes las figuras de protección, monedas y espejos, pero en las fiestas se puede decorar con una corona navideña de la buena suerte.
– Si queremos representar el agua, podemos poner un cuenco lleno de líquido, con flores. De este modo estaremos representando la abundancia de la vida de manera natural.
– Los frutos secos también son una representación de la abundancia alimenticia y nutricional de la tierra.
– Una buena iluminación en toda la casa es importante, pues las energías estancadas se acumulan en lugares húmedos y oscuros, por lo cual es un momento ideal para llenar la casa de luces y brillo.
Fuente: Clarín Entremujeres